Pionera…

800px-Hilma_af_Klint,_portrait_photograph_published_in_1901

Hilma Af Klint nació en Solna -Suecia y pudo estudiar en la Real Academia Sueca de las Artes de Estocolmo, uno de los pocos centros que admitían a mujeres de toda Europa. Allí aprendió a pintar académicamente, pero algo en su interior muy intenso, algo espiritual, la haría diferente a todos sus contemporáneos. Posiblemente debido a la trágica experiencia de acompañar en el lecho de muerte a su hermana de diez años.

Hilma comenzó a destacar sobre sus compañeras ya que era una gran retratista con unas capacidades para captar la personalidad de los modelos que posaban ante ella y porque, saltándose las reglas, realizó estudios integrales eliminando la sutil tela que cubría sus genitales.

Poco a poco fue ganando notoriedad hasta convertirse en una gran pintora, famosa por sus retratos. Trabajos que le permitieron ser económicamente independiente entre 1887 y 1905. En estos años también destacó por sus paisajes…

La espiritualidad y el más allá.

Al principio, sesiones de espiritismo, muy de moda por entonces, en la que pintaba en trance, a modo de la escritura automática surrealista.

Hilma, se empeño en plasmar en los cuadros este mundo supraterreno, desconocido e intrigante pero en la sociedad no estaba muy bien visto eso y menos para una mujer que bien podría ser acusada de bruja, por lo que además de sus experimentos que continuaron de manera secreta, siguió practicando cuadros «normales» para ganarse el pan y nunca participó en exposiciones ni movimientos.

Kandinsky… no fue el primero

Son estas obras secretas sus grandes aportaciones a la historia del arte. Más de 1000 cuadros abstractos realizados mucho antes de que existiera el arte abstracto.

El arte de Hilma era de una abstracción mucho más pura no siguió un proceso para disolver la realidad, plasmó directamente sus sentimientos y emociones.

Hilma, creía que los espíritus podían comunicarse con los vivos y comenzó a participar en sesiones espiritistas. Mientras hacía contacto con los muertos, tomaba notas detalladas y practicaba el dibujo automático.

Durante una sesión en 1906, la artista,con 43 años en ese momento, afirmó que recibió un mensaje de un ser superior que solicitó una “gran comisión”. Sostuvo, que le habían pedido unas pinturas en un plano trascendente, que algún día serían colgadas en un templo circular…

En 1906, Hilma comenzó a trabajar en su primera serie de obras abstractas a las que llamó Urkaos o Caos primordial. Esta serie de 26 pequeños lienzos ilustra la creación de la vida y ciertas dualidades que fascinaron a la artista.

Esta pintura, titulada Caos primordial núm. 7, representa el momento en que el esperma se encuentra con el óvulo.

La narrativa de Hilma enfatiza con el símbolo de “W”, que representa al hombre y la materia, y la “U”, representa a la mujer y lo espiritual. La polaridad y la unión también se representan en color. La artista usó el azul para representar al hombre y el amarillo para simbolizar a la mujer. Cuando los dos tonos se fusionan, crean un verde armonioso, lo que implica que se han convertido espiritualmente en uno mismo.

Edad adulta es parte de la serie De tio största “los diez más grandes” de Hilma Af Klint.

La colección representa las etapas de la vida, incluyendo la infancia, la juventud, la edad adulta y la vejez. Combinan elementos botánicos y objetos orgánicos reconocibles que hacen referencia al nacimiento y al crecimiento. Este enorme lienzo, de tres metros de alto y dos de ancho, fue pintado sobre papel, en el piso de su estudio, y luego pegado sobre un lienzo.

Hilma interpreta la edad adulta en plena floración pintando varias formas fluidas en diferentes tamaños y colores sobre un fondo lila. El símbolo amarillo central se asemeja a una flor, mientras que las espirales y las formas biomórficas son símbolos de crecimiento y fertilidad.

Durante los siguientes nueve años, Hilma fue consumida por esta misión. Completó las pinturas para el templo, una gran serie de 193 obras que explora varios temas.

El grueso de su obra abstracta la realizó en reuniones que hacía, junto con otras cuatro artistas, en las que combinaban el espiritismo con el arte automático.

La creación automática es un proceso o una técnica que los surrealistas pusieron de moda, pero que existía previamente. Es la creación pura e instintiva, sin que medie el pensamiento. Hilma, después de sus sesiones, tomaba un lienzo y se ponía a pintar aquello de lo que los espíritus le habían hablado…

Otra serie titulada El cisne

Se calcula que pudo haber llegado a pintar entre 1000 y 1400 obras de pintura abstracta.

La artista abandonó la pintura en 1925 para dedicarse a la teosofía.

hilma-af-klint_bb5cda77_230417093941_800x1015

La teosofía, además, era una vía para vivir la espiritualidad de manera privada, alejada de los dogmas autoritarios de las iglesias convencionales. Pretendía propiciar un reencuentro entre la filosofía occidental y la oriental, en un momento en que esta última era muy poco valorada en Occidente.

Impulsó un nuevo interés por las religiones orientales, desplazando a Egipto por la India como territorio de exploración espiritual en Occidente, interés que hoy permanece extraordinariamente vivo, incluso a nivel popular. Cabe recordar el círculo de artistas femeninas: Las cinco donde desarrolló la actividad de Af Klint en Estocolmo.

El uso de las formas geométricas por Af Klint a partir de 1912, como el hipercubo desplegado que vemos en la serie El cisne sería su respuesta plástica a las elucubraciones teóricas que definían esa nueva dimensión, tal como aparecían expresadas en las obras del matemático Charles H. Hinton, autor de Relatos científicos y Rudolf Steiner.

También Henderson, realiza un comentario pormenorizado de algunas obras de Af Klint, como que la obra de la pintora sueca compartía idéntica atención a las «realidades invisibles» de Kandinsky, Mondrian, Malévich o Kupka.

El Teósofo Rudolf Steiner, que vio muchos de estos cuadros y se quedó sorprendido por su calidad artística y espiritual. Pero dijo a la artista que ocultara aquellos cuadros durante 50 años, porque nunca serían entendidos.

hilma-af-klint_347919ca_230417094018_800x559

En 1944, Hilma af Klint murió en un accidente de tráfico y dejó más de 1300 obras abstractas, miles de dibujos en sus cuadernos y una tarea para su heredero: su trabajo no debería mostrarse públicamente hasta que se cumplieran al menos 20 años de su muerte.

Cuando el heredero, su sobrino Erik af Klint cumplió con la cláusula de hibernación de su tía y develó los cuadros a finales por la década de 1960, las pinturas sorprendieron.

También lo hicieron las 26.000 páginas de notas adjuntas de la pintora, muchas de las cuales detallan la creación de las obras a partir de 1906, dirigidas por un guía espiritual llamado Amaliel, quien contactó a Hilma durante las sesiones y no sólo “encargó” las pinturas, sino que al menos al principio, según ella, había dirigido su mano mientras pintaba…

En 1986, se expuso por primera vez su obra en un museo.

Ese fue el comienzo del redescubrimiento de Hilma, la que hoy en día es considerada pionera de la abstración, comenzando a exponer sus obras de manera definitiva y con éxito sorprendente de publico, ávido de conocerla.

Deja un comentario