En 1791, con una gran cantidad de deudas, viviendo en medio de una inmensa pobreza material y con su salud quebrantada, Wolfgang Amadeus Mozart 1756-1791,trabaja sin cesar.
El reaccionario emperador Leopoldo II, después de concluir una paz con Turquía, tomó medidas drásticas contra los derechos civiles, incluida la libertad de expresión en su país y territorios. El mecenazgo del emperador se le desvanecía, los conciertos eran escasos, las «entradas de dinero» efímeras»…
Y son precisamente de este período de sus grandes obras maestras como: el último Concierto para piano nº 27 KV 595, un concierto sin encargar algo muy importante por entonces. El Quinteto de cuerda KV 614. El Ave Verum Corpus K.618- el increíble motetete coral, regalo para el director del coro de la iglesia parroquial de Baden, donde la enferma esposa del compositor, Constanze, había ido a» tomar las aguas» para su recuperación… La Clemenza di Tito- encargada de celebrar la coronación en Praga del emperador Leopoldo II como Rey de Bohemia, La Flauta Mágica-escrita para su amigo masónico de la logia, Emanuel Schikaneder y el insuperable hasta hoy Réquiem que no logró terminar.
Y en este dramático contexto escribió …
El bellísimo Concierto para clarinete
Mozart escribió el concierto para clarinete K. 622 a petición de su amigo Stadler, está escrita en la misma tonalidad del Quinteto KV 581, contagiado quizás por la expresividad y brillantez del popular clarinetista, que era conocido como el ‘milagro de Bohemia’.
Originalmente: para clarinete di bassetto en La, dicho instrumento le permitía a Stadler, llegar una tercera menor más grave en Do que en el clarinete soprano en Mi. Mozart en un momento comentó:
“Nunca habría pensado que un clarinete podría ser capaz de imitar la voz humana tan
engañosamente como lo imita. Verdaderamente su instrumento tiene un tono tan suave y encantador que nadie con un corazón podría resistirlo”
7 de octubre de 1791 escribe a su esposa Constanza acerca del gran éxito que en esos días había tenido su ópera La Flauta Mágica y cómo tiene ya casi listo el concierto para clarinete y orquesta que estaba componiendo para Stodla, apodo con el que cariñosamente se refería a Stadler.
En la carta decía que:» jugó dos partidas de billar, vendió su caballo por catorce ducados, preparó una taza de café negro y fumó una pipa antes de orquestar ‘casi todo el Rondó para Stadler».
Lamentablemente la partitura manuscrita del concierto se extravió… según rumores… de la mano de la esposa del compositor. Otros dicen que Stadler la terminaría empeñando por setenta y tres ducados junto con otras composiciones inéditas,con el Quinteto para clarinete y cuerdas en La Mayor y los corni di bassetto fabricados por Lotz, Lamentablemente, este clarinete, no logró tener éxito como instrumento de uso corriente entre los músicos de la época, pero consiguió dar un fuerte empuje a la difusión del instrumento en la orquesta de cámara y como solista.
Concierto difícil
Tiene la forma de la «sonata clásica» y se piensa que es fácil
El primer movimiento, Allegro
La riqueza tímbrica del clarinete se confirma en el registro medio y agudo de Mi mayor -dominante y Do sostenido menor -relativo menor de este, con arpegios ascendentes y descendentes, fragmentos cromáticos, escalas y trinos. De gran riqueza expresiva y variedad de articulaciones y sonoridades que no dejan indiferente a nadie.
El segundo movimiento, Adagio
La exposición comienza directamente con el tema principal, fue usado en la película Memorias de África. Un gran sentido de legato y en la tonalidad de Re mayor.
A diferencia de todos los demás conciertos de Mozart, no hay cadenza para el solista en su primer movimiento, sí en el Adagio y la coda final …reitera las infinitas posibilidades tímbricas y expresivas del instrumento: arpegios, saltos, trinos, escalas, dinámicas llevadas al límite y amplitud de registros, en un temple íntimo de calma y deleite del espectador.
El tercer movimiento- Rondó
Reproduce la exposición de varios temas alternados con el estribillo o tema principal.
Mozart ofrece, un abanico de posibilidades tímbricas a través de un juego y aquí está el detalle, entre en legato y en staccato, la potencialidad sonora del clarinete se ajustan a la perfección y transparencia del estilo clásico que dominaba la época y ganó la aceptación del instrumento como miembro integral de la familia de las maderas.
La bella obra, está llena de sensibilidad y adelantándose a la intencionalidad de la música de épocas posteriores. Se considera pieza obligatoria de todo clarinetista que se precie, se incluye en los concursos para optar por una plaza de clarinete en cualquier orquesta profesional y obviamente de gran lucimiento del solista.
Por empezar: el concierto en total dura aproximadamente 25 minutos, representa un gran esfuerzo para el instrumentista.
Fundamental la digitación ligada a la embocadura, respiración… y otro detalle: la emisión del sonido, este debe ser «dulce» como lo requería el autor: «lo más parecido posible a la voz humana« y algo que a veces se pasa por alto: el perfecto fraseo, hace que la obra sea de una total belleza por sur correcto uso y tempo otorgado a los silencios.
De hecho, muchos años después, compositores, como Carl Maria von Weber, Robert Schumann, Johannes Brahms o Claude Debussy lograran algunas piezas para clarinete a la altura de esta sublime creación.
El estreno…
La obra se terminó el día 8 y se estrenó el 16 de octubre de 1791, en una actuación que Stadler ofreció en el Teatro Estatal de Praga donde años atrás, Mozart había estrenado su ópera «Don Giovani». El concierto, aunque agradó a los críticos, no les impresionó demasiado….
Siete semanas después del estreno, falleció el compositor la noche del 5 de diciembre de este mismo año.
Esta obra, por su incuestionable perfección y transparencia, sería el «Testamento musical de Mozart» de no ser por esa maravilla que es su Requiem...
Con el manuscrito del concierto perdido… lo que se ha impreso desde su primera edición es la adaptación que hiciera el editor de Mozart para el clarinete en La, ya que la parte original estaba destinada para clarinete de bassetto -‘basset horn’, poco común. El clarinete en La resultaba mas lógico, usual y comercialmente.
El el último cuarto del siglo XX surge el interés por los instrumentos antiguos. En 1973, el concierto fue grabado con un instrumento histórico por Hans Deinzer-1934 – 2020 clarinetista alemán multifacético que abrió la puerta a varias otras grabaciones con instrumentos «de época». Deizer ejerció exitosamente la docencia, entre sus alumnos se encuentran varios «grandes» como: Sabine Meyer, Wolfgang Meyer, Suzanne Stephens, Nicholas Cox y Martin Fröst, este instrumentista, ha creado inusuales recitales y espectáculos con su clarinete. Su versión del concierto fue votada en el 2005 como «la mejor de todos los tiempos». El clarinetista sueco, grabó la obra en clarinete di Basseto con la participación de la Amsterdam Sinfonietta.
Mozart Clarinet Concerto 1 A Major_KV 622_3rd Movement Rondeau Allegro – YouTube
No encontré la grabación famosa completa con el instrumento para la que fue escrito… también esta es de hace varios años pero nos da una idea de lo que es capaz de lograr este consagrado clarinetista. Mozart hubiera estado de lo más que satisfecho por la ejecución de su obra que le hace honor con su reconocida maestría.